Descubre Lloret de Mar más allá de sus playas concurridas y sus atracciones turísticas de siempre. Te propongo seis planes que conocen muy pocos —¡y que te harán sentir como un habitante de la Costa Brava!— para que te lleves un recuerdo inolvidable.

1. Paseo al amanecer por el Camí de Ronda

Olvídate de la multitud y levántate temprano para recorrer el tramo que une la Cala Banys con la playa de Fenals. A esa hora solo escucharás el rumor del mar y el crujir de tus pasos sobre la roca. El sol se asoma entre pinos y te regala reflejos dorados sobre el agua. Lleva zapatillas cómodas y una botella de agua, y tómate un momento para practicar respiración consciente frente al Mediterráneo.

2. Desayuno de “pa amb tomàquet” en la plaza de l’Església

En el corazón del casco antiguo, muy cerca de la iglesia parroquial, encontrarás la pequeña cafetería Ca la Pepa. Prueba su versión casera de pa amb tomàquet con aceite de calidad, acompañado de un café con leche cremoso. Sentarte en una terraza de piedra y ver despertar el pueblo es un plan que ni los guías turísticos mencionan.

3. Taller de cerámica artesanal en un taller familiar

A pocos minutos caminando de la zona turística hay un obrador donde Marta, tercera generación de alfareros, organiza talleres reducidos. En dos horas aprenderás a modelar un cuenco o una bandeja, y descubrirás secretos de la cerámica tradicional de la región. Además, podrás llevarte tu pieza firmada a casa como recuerdo.

4. Ruta de miradores secretos en moto eléctrica

Alquila una moto eléctrica (silenciosa y sostenible) y sigue un recorrido circular que pasa por el mirador de Sant Joan, el de Sa Caleta y termina en el balcón de Tossa de Mar. El viento en la cara, el mediodía bañando de luz los acantilados, y varias paradas para fotografiar calas escondidas: una experiencia “top” para los amantes de las dos ruedas y la aventura.

5. Tarde de lectura y vinos naturales en la bodega La Calma

Escóndete del bullicio en esta pequeña bodega urbana, decorada con vigas vistas y plantas colgantes. Su especialidad son los vinos naturales de pequeñas viñas empordanesas. Pide una copa de moscatel o garnacha, y acompáñala con un libro (puedes elegir uno de su estantería intercambiable). Aquí el tiempo transcurre despacio y cada sorbo invita a la pausa.

6. Cena íntima en el chiringuito gastronómico de la Vinyeta

A cinco kilómetros de Lloret, en medio de un campo de olivos y viñas, encontrarás La Vinyeta: un chiringuito gourmet de temporada. Su menú cambia cada semana según lo que recojan en el huerto y lo que traigan los pescadores locales. Reserva con antelación y disfruta de entrantes fríos, arroces marineros o platos de verduras a la brasa, siempre maridados con vinos ecológicos de la zona.

¿Te animas? Comparte tus fotos y etiquetanos en nuestro Instagram @molidemar.lloret y cuéntanos cuál fue tu experiencia favorita. ¡Nos vemos en la próxima aventura!